VELOCIDAD DE CARACOL
Lectura: Romanos 5:1-5.
"El sufrimiento produce perseverancia; la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza" Romanos 5:3-4 (NVI)
Uno de las primeras cosas que recuerdo de mi niñez era observar los caracoles en las flores del jardín del patio trasero de nuestra casa. Me fascinaba ver esta pequeña criatura con un caparazón, una pequeña panza alargada y ojitos que se convertían en una especie de periscopios. Pero lo que realmente parecía extraño era la lentitud con que se movía.
¿A qué velocidad se traslada un caracol? Un estudio determinó que recorre aproximadamente 12,20 m en una hora. ¡Con razón usamos la frase más «lento» que un caracol…!
Aunque los caracoles se mueven con paso lento, tienen una virtud que los caracteriza: la paciencia. Charles Spurgeon, el gran predicador del siglo xix, señaló con ironía: «Por su perseverancia, el caracol llegó al arca».
Según el apóstol Pablo, la perseverancia es un elemento clave en el desarrollo del carácter. Lo explicó así: «El sufrimiento produce perseverancia» (Romanos 5:3, NVI). Luego, sobre ese fundamento, se construyen el carácter y la esperanza (v. 4). La palabra griega original que se traduce «perseverancia» significa «resolución, constancia y resistencia». Se empleó para referirse a los creyentes que son constantes en su andar en la fe, a pesar de las pruebas numerosas y angustiantes.
¿Las dificultades te han hecho volver tan lento como un caracol? Cobra ánimo. Dios no exige que lleguemos rápido, Él espera que progresemos con perseverancia.
Reflexión: Todo gran logro requiere una gran perseverancia.
"El sufrimiento produce perseverancia; la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza" Romanos 5:3-4 (NVI)
Uno de las primeras cosas que recuerdo de mi niñez era observar los caracoles en las flores del jardín del patio trasero de nuestra casa. Me fascinaba ver esta pequeña criatura con un caparazón, una pequeña panza alargada y ojitos que se convertían en una especie de periscopios. Pero lo que realmente parecía extraño era la lentitud con que se movía.
¿A qué velocidad se traslada un caracol? Un estudio determinó que recorre aproximadamente 12,20 m en una hora. ¡Con razón usamos la frase más «lento» que un caracol…!
Aunque los caracoles se mueven con paso lento, tienen una virtud que los caracteriza: la paciencia. Charles Spurgeon, el gran predicador del siglo xix, señaló con ironía: «Por su perseverancia, el caracol llegó al arca».
Según el apóstol Pablo, la perseverancia es un elemento clave en el desarrollo del carácter. Lo explicó así: «El sufrimiento produce perseverancia» (Romanos 5:3, NVI). Luego, sobre ese fundamento, se construyen el carácter y la esperanza (v. 4). La palabra griega original que se traduce «perseverancia» significa «resolución, constancia y resistencia». Se empleó para referirse a los creyentes que son constantes en su andar en la fe, a pesar de las pruebas numerosas y angustiantes.
¿Las dificultades te han hecho volver tan lento como un caracol? Cobra ánimo. Dios no exige que lleguemos rápido, Él espera que progresemos con perseverancia.
Reflexión: Todo gran logro requiere una gran perseverancia.
¡NADIE SE ACUERDA!
Lectura: Eclesiastés 9:13-18.
"…un hombre […] libra a la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel hombre pobre" Eclesiastés 9:15
En un comentario sobre Eclesiastés 9:15, Martín Lutero cita la historia de Temístocles, el soldado y estadista que comandaba el escuadrón ateniense. Con su estrategia, ganó la Batalla de Salamina, expulsó al ejército persa de suelo griego y salvó su ciudad. Pocos años después, cayó en desprestigio, sus conciudadanos lo condenaron al ostracismo y fue desterrado de Atenas. Por eso, Lutero concluye: «Temístocles benefició mucho a su ciudad, pero recibió una tremenda ingratitud».
Por alguna razón, las multitudes ignoran u olvidan rápidamente el bien que un hombre pobre o humilde logra mediante su sabiduría. Pero no importa. «Mejor es la sabiduría que la fuerza, aunque la ciencia del pobre sea menospreciada» (v. 16). Es preferible ser un sabio callado y honesto, aunque olvidado, que deja un legado de buenas acciones en vez de un necio arrogante y estridente que, aunque aplaudido, «destruye mucho bien» (v. 18).
Por lo tanto, lo que en definitiva importa no es el reconocimiento ni la gratitud por el trabajo que hemos hecho, sino las almas de aquellas personas amables en quienes hemos sembrado las semillas de justicia. Dicho de otro modo: «… la sabiduría es justificada por todos sus hijos» (Lucas 7:35). ¿A quién has influido con tu sabiduría avisada y piadosa?
Reflexión: Una persona sabia aplica sus metas terrenales en las ganancias eternas.
"…un hombre […] libra a la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel hombre pobre" Eclesiastés 9:15
En un comentario sobre Eclesiastés 9:15, Martín Lutero cita la historia de Temístocles, el soldado y estadista que comandaba el escuadrón ateniense. Con su estrategia, ganó la Batalla de Salamina, expulsó al ejército persa de suelo griego y salvó su ciudad. Pocos años después, cayó en desprestigio, sus conciudadanos lo condenaron al ostracismo y fue desterrado de Atenas. Por eso, Lutero concluye: «Temístocles benefició mucho a su ciudad, pero recibió una tremenda ingratitud».
Por alguna razón, las multitudes ignoran u olvidan rápidamente el bien que un hombre pobre o humilde logra mediante su sabiduría. Pero no importa. «Mejor es la sabiduría que la fuerza, aunque la ciencia del pobre sea menospreciada» (v. 16). Es preferible ser un sabio callado y honesto, aunque olvidado, que deja un legado de buenas acciones en vez de un necio arrogante y estridente que, aunque aplaudido, «destruye mucho bien» (v. 18).
Por lo tanto, lo que en definitiva importa no es el reconocimiento ni la gratitud por el trabajo que hemos hecho, sino las almas de aquellas personas amables en quienes hemos sembrado las semillas de justicia. Dicho de otro modo: «… la sabiduría es justificada por todos sus hijos» (Lucas 7:35). ¿A quién has influido con tu sabiduría avisada y piadosa?
Reflexión: Una persona sabia aplica sus metas terrenales en las ganancias eternas.
¿POR QUÉ SUFRIR?
Lectura: Mateo 5:1-12.
"Bienaventurados los pobres en espíritu" Mateo 5:3
Jesús enseñó que el mundo, visto desde la perspectiva de Dios, se inclina a favor de los oprimidos. Esta enseñanza aparece en el Sermón del Monte y en otras declaraciones del Señor: los primeros serán postreros (Mateo 19:30; Marcos 10:31; Lucas 13:30), y el que se humilla será enaltecido (Lucas 14:11,18:14). Pero ¿por qué escogería Dios a los oprimidos para brindarles una atención especial?
1. El sufrimiento nos ayuda a darnos cuenta de nuestra imperiosa necesidad de redención.
2. El sufrimiento nos ayuda a experimentar nuestra dependencia de Dios e interdependencia con otras personas.
3. El sufrimiento nos ayuda a distinguir entre las necesidades y los lujos.
4. El sufrimiento nos ayuda a responder al llamado del evangelio, porque podemos desesperarnos tanto que clamamos a Dios.
Los pobres, los hambrientos, los que lloran y los que sufren son bendecidos (Mateo 5:3-6) porque diariamente perciben su falta de autosuficiencia. Deben recurrir a alguien que los fortalezca. Las personas ricas, exitosas y hermosas quizá vivan toda su vida dependiendo de sus talentos naturales; sin embargo, es más probable que los necesitados, los dependientes y los insatisfechos reciban el regalo del amor de Dios.
«Bienaventurados los pobres en espíritu». ¿Por qué? Porque «de ellos es el reino de los cielos» (Mateo 5:3).
Reflexión: Cuanto más débiles nos sentimos, tanto más nos apoyamos en Dios.
"Bienaventurados los pobres en espíritu" Mateo 5:3
Jesús enseñó que el mundo, visto desde la perspectiva de Dios, se inclina a favor de los oprimidos. Esta enseñanza aparece en el Sermón del Monte y en otras declaraciones del Señor: los primeros serán postreros (Mateo 19:30; Marcos 10:31; Lucas 13:30), y el que se humilla será enaltecido (Lucas 14:11,18:14). Pero ¿por qué escogería Dios a los oprimidos para brindarles una atención especial?
1. El sufrimiento nos ayuda a darnos cuenta de nuestra imperiosa necesidad de redención.
2. El sufrimiento nos ayuda a experimentar nuestra dependencia de Dios e interdependencia con otras personas.
3. El sufrimiento nos ayuda a distinguir entre las necesidades y los lujos.
4. El sufrimiento nos ayuda a responder al llamado del evangelio, porque podemos desesperarnos tanto que clamamos a Dios.
Los pobres, los hambrientos, los que lloran y los que sufren son bendecidos (Mateo 5:3-6) porque diariamente perciben su falta de autosuficiencia. Deben recurrir a alguien que los fortalezca. Las personas ricas, exitosas y hermosas quizá vivan toda su vida dependiendo de sus talentos naturales; sin embargo, es más probable que los necesitados, los dependientes y los insatisfechos reciban el regalo del amor de Dios.
«Bienaventurados los pobres en espíritu». ¿Por qué? Porque «de ellos es el reino de los cielos» (Mateo 5:3).
Reflexión: Cuanto más débiles nos sentimos, tanto más nos apoyamos en Dios.
FELIZZZZZZ DÍA PAPÁ...!!!
Nuestro Destacamento saluda a los miles y miles de padres de los Exploradores del Rey en todo mundo por ser el día del padre.............. Esperamos que la paz y bendiciones more en sus vidas y que como siempre puedan guiar a las familias que Dios les ha dado....
FELIZ DÍA DEL PADRE.......!!!!!!!!!!!
DECISIÓN INMUTABLE
Lectura: 2 Corintios 5:16-21.
"Todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación" 2 Corintios 5:18
Uno de los grandes privilegios de trabajar en el Instituto Bíblico Moody era oír relatos de graduados de esa institución que habían impactado al mundo con el mensaje de Cristo. Sus historias de sacrificio, perseverancia y pasión por el evangelio eran estimulantes.
A fines del siglo xix, Mary McLeod Bethune estudió en este instituto en Chicago durante dos años, capacitándose para ir como misionera a África. Sin embargo, después de graduarse, por ser una mujer afroamericana, ninguna organización le daba la oportunidad de servir en el campo misionero. Aunque no pudo cumplir su sueño de ir a África, no abandonó su llamado a servir a Jesús. Sin intimidarse, comenzó una pequeña escuela en Florida, Estados Unidos, para niñas afroamericanas, que finalmente llegó a ser el Bethune-Cookman College. Esta mujer se convirtió en una influencia poderosa para cambiar la condición social de las mujeres.
El legado de María fue forjado por su determinación de servir a Jesús a pesar de que sus sueños se hubiesen hecho pedazos. Ella sabía que Dios le había confiado «el ministerio de la reconciliación» (2 Corintios 5:18), y no se rendiría.
Este mandato no fue sólo para Mary McLeod Bethune. Contarles a las personas que pueden reconciliarse con Dios por medio de Cristo es un llamado que se nos hace a todos. Busca hoy mismo una manera de marcar una diferencia que lleve a los demás a Jesús… ¡allí donde estás!
Reflexión: Una de las cualidades que Dios busca en Su pueblo es un corazón dispuesto a servirle.
"Todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación" 2 Corintios 5:18
Uno de los grandes privilegios de trabajar en el Instituto Bíblico Moody era oír relatos de graduados de esa institución que habían impactado al mundo con el mensaje de Cristo. Sus historias de sacrificio, perseverancia y pasión por el evangelio eran estimulantes.
A fines del siglo xix, Mary McLeod Bethune estudió en este instituto en Chicago durante dos años, capacitándose para ir como misionera a África. Sin embargo, después de graduarse, por ser una mujer afroamericana, ninguna organización le daba la oportunidad de servir en el campo misionero. Aunque no pudo cumplir su sueño de ir a África, no abandonó su llamado a servir a Jesús. Sin intimidarse, comenzó una pequeña escuela en Florida, Estados Unidos, para niñas afroamericanas, que finalmente llegó a ser el Bethune-Cookman College. Esta mujer se convirtió en una influencia poderosa para cambiar la condición social de las mujeres.
El legado de María fue forjado por su determinación de servir a Jesús a pesar de que sus sueños se hubiesen hecho pedazos. Ella sabía que Dios le había confiado «el ministerio de la reconciliación» (2 Corintios 5:18), y no se rendiría.
Este mandato no fue sólo para Mary McLeod Bethune. Contarles a las personas que pueden reconciliarse con Dios por medio de Cristo es un llamado que se nos hace a todos. Busca hoy mismo una manera de marcar una diferencia que lleve a los demás a Jesús… ¡allí donde estás!
Reflexión: Una de las cualidades que Dios busca en Su pueblo es un corazón dispuesto a servirle.
CAMPEÓN DE TIRO
Lectura: Filipenses 3:7-14.
"Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús" Filipenses 3:14
Matt Emmons, que obtuvo la medalla de oro en la prueba de rifle en las Olimpíadas de 2004 en Atenas, estaba listo para ganar otro evento. Ocupaba el primer puesto y esperaba dar exactamente en el blanco con su último tiro. Pero algo salió mal: dio en el blanco… ¡pero estaba apuntando al que no le correspondía! Ese enfoque equivocado lo hizo descender al octavo puesto y le costó una medalla.
En la Carta de Pablo a los Filipenses, el apóstol reafirmó la importancia de centrarse en el blanco correcto en nuestra vida cristiana. «Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús», dijo él (3:14).
Pablo utilizó el término «meta» como una ilustración tomada de un atleta que corre una carrera. Es interesante observar que la misma palabra también se empleaba para describir un blanco para arrojar flechas. En ambos casos, la posibilidad de ganar depende de enfocar bien. Para el creyente, durante toda su vida, ese enfoque debería consistir en procurar parecerse cada día más a nuestro Salvador Jesucristo (Romanos 8:28-29;Gálatas 5:22-23).
¿Hacia dónde apuntas hoy? ¿Estás preocupado por progresar y hacer que la vida sea más confortable? Si eres creyente, el blanco correcto hacia donde debes apuntar es parecerte más al Hijo de Dios (2 Corintios 3:18). ¡Asegúrate hoy de estar apuntando al blanco correcto!
Reflexión: Para aprovechar tu vida al máximo, haz que las metas de Dios sean tus metas.
"Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús" Filipenses 3:14
Matt Emmons, que obtuvo la medalla de oro en la prueba de rifle en las Olimpíadas de 2004 en Atenas, estaba listo para ganar otro evento. Ocupaba el primer puesto y esperaba dar exactamente en el blanco con su último tiro. Pero algo salió mal: dio en el blanco… ¡pero estaba apuntando al que no le correspondía! Ese enfoque equivocado lo hizo descender al octavo puesto y le costó una medalla.
En la Carta de Pablo a los Filipenses, el apóstol reafirmó la importancia de centrarse en el blanco correcto en nuestra vida cristiana. «Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús», dijo él (3:14).
Pablo utilizó el término «meta» como una ilustración tomada de un atleta que corre una carrera. Es interesante observar que la misma palabra también se empleaba para describir un blanco para arrojar flechas. En ambos casos, la posibilidad de ganar depende de enfocar bien. Para el creyente, durante toda su vida, ese enfoque debería consistir en procurar parecerse cada día más a nuestro Salvador Jesucristo (Romanos 8:28-29;Gálatas 5:22-23).
¿Hacia dónde apuntas hoy? ¿Estás preocupado por progresar y hacer que la vida sea más confortable? Si eres creyente, el blanco correcto hacia donde debes apuntar es parecerte más al Hijo de Dios (2 Corintios 3:18). ¡Asegúrate hoy de estar apuntando al blanco correcto!
Reflexión: Para aprovechar tu vida al máximo, haz que las metas de Dios sean tus metas.
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