VELOCIDAD DE CARACOL

Lectura: Romanos 5:1-5.

"El sufrimiento produce perseverancia; la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza" Romanos 5:3-4 (NVI)

Uno de las primeras cosas que recuerdo de mi niñez era observar los caracoles en las flores del jardín del patio trasero de nuestra casa. Me fascinaba ver esta pequeña criatura con un caparazón, una pequeña panza alargada y ojitos que se convertían en una especie de periscopios. Pero lo que realmente parecía extraño era la lentitud con que se movía.

¿A qué velocidad se traslada un caracol? Un estudio determinó que recorre aproximadamente 12,20 m en una hora. ¡Con razón usamos la frase más «lento» que un caracol…!

Aunque los caracoles se mueven con paso lento, tienen una virtud que los caracteriza: la paciencia. Charles Spurgeon, el gran predicador del siglo xix, señaló con ironía: «Por su perseverancia, el caracol llegó al arca».

Según el apóstol Pablo, la perseverancia es un elemento clave en el desarrollo del carácter. Lo explicó así: «El sufrimiento produce perseverancia» (Romanos 5:3, NVI). Luego, sobre ese fundamento, se construyen el carácter y la esperanza (v. 4). La palabra griega original que se traduce «perseverancia» significa «resolución, constancia y resistencia». Se empleó para referirse a los creyentes que son constantes en su andar en la fe, a pesar de las pruebas numerosas y angustiantes.

¿Las dificultades te han hecho volver tan lento como un caracol? Cobra ánimo. Dios no exige que lleguemos rápido, Él espera que progresemos con perseverancia.

Reflexión: Todo gran logro requiere una gran perseverancia.

¡NADIE SE ACUERDA!

Lectura: Eclesiastés 9:13-18.

"…un hombre […] libra a la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel hombre pobre" Eclesiastés 9:15

En un comentario sobre Eclesiastés 9:15, Martín Lutero cita la historia de Temístocles, el soldado y estadista que comandaba el escuadrón ateniense. Con su estrategia, ganó la Batalla de Salamina, expulsó al ejército persa de suelo griego y salvó su ciudad. Pocos años después, cayó en desprestigio, sus conciudadanos lo condenaron al ostracismo y fue desterrado de Atenas. Por eso, Lutero concluye: «Temístocles benefició mucho a su ciudad, pero recibió una tremenda ingratitud».

Por alguna razón, las multitudes ignoran u olvidan rápidamente el bien que un hombre pobre o humilde logra mediante su sabiduría. Pero no importa. «Mejor es la sabiduría que la fuerza, aunque la ciencia del pobre sea menospreciada» (v. 16). Es preferible ser un sabio callado y honesto, aunque olvidado, que deja un legado de buenas acciones en vez de un necio arrogante y estridente que, aunque aplaudido, «destruye mucho bien» (v. 18).

Por lo tanto, lo que en definitiva importa no es el reconocimiento ni la gratitud por el trabajo que hemos hecho, sino las almas de aquellas personas amables en quienes hemos sembrado las semillas de justicia. Dicho de otro modo: «… la sabiduría es justificada por todos sus hijos» (Lucas 7:35). ¿A quién has influido con tu sabiduría avisada y piadosa?

Reflexión: Una persona sabia aplica sus metas terrenales en las ganancias eternas.

¿POR QUÉ SUFRIR?

Lectura: Mateo 5:1-12.

"Bienaventurados los pobres en espíritu" Mateo 5:3

Jesús enseñó que el mundo, visto desde la perspectiva de Dios, se inclina a favor de los oprimidos. Esta enseñanza aparece en el Sermón del Monte y en otras declaraciones del Señor: los primeros serán postreros (Mateo 19:30Marcos 10:31Lucas 13:30), y el que se humilla será enaltecido (Lucas 14:11,18:14). Pero ¿por qué escogería Dios a los oprimidos para brindarles una atención especial?

1. El sufrimiento nos ayuda a darnos cuenta de nuestra imperiosa necesidad de redención.

2. El sufrimiento nos ayuda a experimentar nuestra dependencia de Dios e interdependencia con otras personas.

3. El sufrimiento nos ayuda a distinguir entre las necesidades y los lujos.

4. El sufrimiento nos ayuda a responder al llamado del evangelio, porque podemos desesperarnos tanto que clamamos a Dios.

Los pobres, los hambrientos, los que lloran y los que sufren son bendecidos (Mateo 5:3-6) porque diariamente perciben su falta de autosuficiencia. Deben recurrir a alguien que los fortalezca. Las personas ricas, exitosas y hermosas quizá vivan toda su vida dependiendo de sus talentos naturales; sin embargo, es más probable que los necesitados, los dependientes y los insatisfechos reciban el regalo del amor de Dios.

«Bienaventurados los pobres en espíritu». ¿Por qué? Porque «de ellos es el reino de los cielos» (Mateo 5:3).

Reflexión: Cuanto más débiles nos sentimos, tanto más nos apoyamos en Dios.

FELIZZZZZZ DÍA PAPÁ...!!!

Nuestro Destacamento saluda a los miles y miles de padres de los Exploradores del Rey en todo mundo por ser el día del padre.............. Esperamos que la paz y bendiciones more en sus vidas y que como siempre puedan guiar a las familias que Dios les ha dado....
FELIZ DÍA DEL PADRE.......!!!!!!!!!!!

DECISIÓN INMUTABLE

Lectura: 2 Corintios 5:16-21.

"Todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación" 2 Corintios 5:18

Uno de los grandes privilegios de trabajar en el Instituto Bíblico Moody era oír relatos de graduados de esa institución que habían impactado al mundo con el mensaje de Cristo. Sus historias de sacrificio, perseverancia y pasión por el evangelio eran estimulantes.

A fines del siglo xix, Mary McLeod Bethune estudió en este instituto en Chicago durante dos años, capacitándose para ir como misionera a África. Sin embargo, después de graduarse, por ser una mujer afroamericana, ninguna organización le daba la oportunidad de servir en el campo misionero. Aunque no pudo cumplir su sueño de ir a África, no abandonó su llamado a servir a Jesús. Sin intimidarse, comenzó una pequeña escuela en Florida, Estados Unidos, para niñas afroamericanas, que finalmente llegó a ser el Bethune-Cookman College. Esta mujer se convirtió en una influencia poderosa para cambiar la condición social de las mujeres.

El legado de María fue forjado por su determinación de servir a Jesús a pesar de que sus sueños se hubiesen hecho pedazos. Ella sabía que Dios le había confiado «el ministerio de la reconciliación» (2 Corintios 5:18), y no se rendiría.

Este mandato no fue sólo para Mary McLeod Bethune. Contarles a las personas que pueden reconciliarse con Dios por medio de Cristo es un llamado que se nos hace a todos. Busca hoy mismo una manera de marcar una diferencia que lleve a los demás a Jesús… ¡allí donde estás!

Reflexión: Una de las cualidades que Dios busca en Su pueblo es un corazón dispuesto a servirle.

CAMPEÓN DE TIRO

Lectura: Filipenses 3:7-14.

"Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús" Filipenses 3:14

Matt Emmons, que obtuvo la medalla de oro en la prueba de rifle en las Olimpíadas de 2004 en Atenas, estaba listo para ganar otro evento. Ocupaba el primer puesto y esperaba dar exactamente en el blanco con su último tiro. Pero algo salió mal: dio en el blanco… ¡pero estaba apuntando al que no le correspondía! Ese enfoque equivocado lo hizo descender al octavo puesto y le costó una medalla.

En la Carta de Pablo a los Filipenses, el apóstol reafirmó la importancia de centrarse en el blanco correcto en nuestra vida cristiana. «Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús», dijo él (3:14).

Pablo utilizó el término «meta» como una ilustración tomada de un atleta que corre una carrera. Es interesante observar que la misma palabra también se empleaba para describir un blanco para arrojar flechas. En ambos casos, la posibilidad de ganar depende de enfocar bien. Para el creyente, durante toda su vida, ese enfoque debería consistir en procurar parecerse cada día más a nuestro Salvador Jesucristo (Romanos 8:28-29;Gálatas 5:22-23).

¿Hacia dónde apuntas hoy? ¿Estás preocupado por progresar y hacer que la vida sea más confortable? Si eres creyente, el blanco correcto hacia donde debes apuntar es parecerte más al Hijo de Dios (2 Corintios 3:18). ¡Asegúrate hoy de estar apuntando al blanco correcto!

Reflexión: Para aprovechar tu vida al máximo, haz que las metas de Dios sean tus metas.

NUNCA DIGAS NUNCA

Lectura: Hechos 9:1-22.

"En seguida predicaba a Cristo en las sinagogas, diciendo que éste era el Hijo de Dios" Hechos 9:20

Mientras caminaba con un amigo por un sendero junto al antiguo Muro de Berlín, él me dijo: «Este es uno de esos lugares “nunca digas nunca” de mi vida». Me explicó que, durante los años en que el muro dividía la ciudad, había hecho una docena de viajes a través del paso fronterizo Checkpoint Charlie para alentar a los miembros de la iglesia que vivían bajo constante vigilancia y oposición en Alemania del Este. En más de una ocasión, los guardias de la frontera lo habían detenido, interrogado y hostigado.

En 1988, él llevo a sus hijos a Berlín Occidental, y les dijo: «Miren bien este muro porque, algún día, cuando traigan a sus hijos aquí, seguirá estando». Un año después no estaba más.

Cuando Saulo de Tarso comenzó a atacar a los seguidores de Jesús, nadie se imaginaba que alguna vez se convertiría en discípulo de Cristo. «Jamás. Imposible». Sin embargo, Hechos 9:1-9 registra la historia del encuentro enceguecedor de Saulo con Jesús en el camino a Damasco. Pocos días después de ese acontecimiento que le cambió la vida, Saulo estaba predicando en las sinagogas de aquella ciudad y diciendo que Jesús era el Hijo de Dios, lo cual llenaba de asombro a todos los que lo escuchaban (vv. 20-21).

En lo que respecta a la obra de Dios en las personas más complicadas que conozcamos, nunca deberíamos decir «nunca».

Reflexión: Nunca digas «nunca» cuando se trata de lo que Dios puede hacer.

ACERCARLOS A JESÚS

Lectura: Lucas 18:15-17.

"Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos" Marcos 10:14

La lectura bíblica de Lucas 18 que habla acerca de los niños parecía rara en el servicio fúnebre de David Holquist. Después de todo, tenía 77 años cuando murió.

Sin embargo, el pastor dijo que los versículos se aplicaban perfectamente a David, que había sido profesor en una escuela durante muchos años. Parte de su legado era haber dedicado tiempo a los niños, tanto a los suyos como a los de otras personas, ya que hacía marionetas y siluetas de animales con globos inflados con aire. Cuando se reunía con otras personas para planificar actividades de la iglesia, solía preguntar: «¿Y qué hacemos con los niños?». Se ocupaba de cosas que no sólo ayudaban a los adultos a adorar a Dios, sino también a los chicos.

Lucas 18 nos muestra cuánto le interesaban los niños a Jesús. Cuando la gente los llevaba cerca de Él, los discípulos querían proteger al Señor, un hombre ocupado, del asedio de esas personitas molestas. Pero, al parecer, a Él no le molestaban en absoluto. Al contrario. La Biblia dice que Jesús «se indignó» con los discípulos y dijo: «Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis» (v. 16). Marcos agrega que el Señor los tomaba en Sus brazos y los bendecía (10:14-16).

Examinemos nuestra actitud hacia los niños y luego sigamos el ejemplo de David Holquist. Busca algunas maneras de ayudarlos a acercarse a Jesús.

Reflexión: A Dios le interesan muchísimo los niños.

OFRENDA DIGNA

Lectura: Génesis 4:1-7.

"Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta" Génesis 4:7

Me alegré mucho cuando un amigo mutuo le regaló una Biblia a mi vecina. Sin embargo, ella me dijo que había dejado de leerla ya que no podía entender por qué Dios había sido tan injusto como para rechazar la ofrenda de Caín. «Después de todo —dijo ella—, como era granjero, simplemente le presentó a Dios lo que tenía. ¿Esperaba Dios que él comprara alguna otra clase de sacrificio para ofrecerle?». Es lamentable, pero ella no había entendido la idea.

No significaba que a Dios no le gustaran las verduras, sino que sabía que la ofrenda de Caín encubría una actitud equivocada. Él no estaba completamente entregado al Señor, como lo revela el hecho de no vivir conforme a Sus caminos.

Es fácil adorar al Señor por fuera mientras nos negamos obstinadamente a entregar aspectos internos. Judas escribe sobre personas exteriormente religiosas que usan las actividades espirituales para esconder la realidad de sus vidas pecaminosas: «¡Ay de ellos! porque han seguido el camino de Caín» (Judas 1:11). Podemos servir fielmente a Dios, cantarle alabanzas y ofrendar generosamente para Su obra, pero Él no quiere nada de eso si no lo hacemos de corazón.

¿Ocupa el Señor el primer lugar por encima de nuestros planes y sueños? ¿Es Él más valioso que el pecado que nos tienta? Decirle que es más precioso que cualquier otra cosa o persona en nuestras vidas es la clase de ofrenda que el Señor nunca rechazará.

Reflexión: Dios nunca rechazará un corazón consagrado a Él.

PEDACITO DE CIELO

Lectura: Éxodo 25:1-9.
"¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?" 1 Corintios 3:16 

Hace un tiempo, mi esposa encontró a una mujer que necesitaba transporte. Al pensar que quizá Dios había preparado la situación, aceptó llevarla. En el trayecto, la mujer le contó que era creyente, pero que estaba luchando contra un problema de drogadicción. Mi esposa escuchó a esta angustiada mujer y luego le habló. Mientras le daba esperanzas sobre un mañana mejor, creo que, en cierta medida, esa mujer experimentó un pedacito de cielo en la tierra.
 

Cuando Dios le indicó a Moisés que construyera el tabernáculo según Sus especificaciones, fue para que Su pueblo pudiera sentir Su presencia. Me gusta pensar en eso como un pedacito de cielo en la tierra. El templo también era un ejemplo palpable de la presencia de Dios en este mundo (
1 Reyes 5–8). El propósito de estos lugares sagrados era que Dios morara entre Su pueblo. Este fue el plan de Dios cuando Jesús, el templo perfecto, «habitó» entre nosotros (Juan 1:14).
 

Cuando Jesús ascendió al cielo, envió al Espíritu Santo a morar en Sus seguidores (
Juan 14:16-17), para que nosotros fuésemos tabernáculos y templos de Dios en el mundo (1 Corintios 3:16; 6:19). Como representantes de la presencia del Señor, busquemos formas de brindar paz y esperanza de cielo a las demás personas que están en este mundo.
 

Reflexión: Un creyente dispuesto a realizar cosas pequeñas por otros puede hacer grandes obras para Dios.

FELICIDADES MADRECITAS !!!

Nuestro Destacamento se une al saludo de millones de personas para felicitar a las madres de todo el mundo, por ser hoy el día internacional de las madres.......... Esperamos que nuestro Dios las llene de mucha paz y bendiciones...... GRACIAS POR ESE AMOR INCONDICIONAL MADRE MÍA......


TIEMPO PARA TI

Lectura: Salmo 34:4-18.

"Este pobre clamó, y le oyó Jehová, y lo libró de todas sus angustias"Salmo 34:6

El historiador Casio Dion registró un acontecimiento revelador de la vida del emperador romano Adriano, que gobernó en 117–138 d.C.: «En una ocasión, cuando una mujer le hizo un pedido [a Adriano] mientras pasaba por allí durante un viaje, al principio él le dijo: “No tengo tiempo”; pero después, cuando ella exclamó, “entonces, deja de ser emperador”, él se volvió y le concedió una audiencia».

¡Cuántas veces decimos o escuchamos decir: «Ahora no, estoy ocupado» o «lo siento, pero no tengo tiempo»! Sin embargo, nuestro Padre celestial, el Señor y Creador de todas las cosas, siempre tiene tiempo para nosotros. El salmista escribió: «Los ojos de Jehová están sobre los justos, y atentos sus oídos al clamor de ellos. […] Claman los justos, y Jehová oye, y los libra de todas sus angustias» (Salmo 34:15,17).

Dios no es como el emperador o como un ejecutivo ocupado que trata de evitar las interrupciones, sino que Su gozo, como Padre, es escuchar a Sus hijos y responderles. «Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu» (v. 18).

La deducción final de Adriano fue: «Debo dedicarles tiempo a mis súbditos». El postulado inicial de Dios es: «Siempre tengo tiempo para los que acuden a mí». Cada vez que tengamos necesidad de hablar, el Señor estará dispuesto a escucharnos.

Reflexión: Dios nunca está demasiado ocupado para escuchar a Sus hijos.

FELIZ CUMPLE !!!

Nuestro Destacamento Felicita a uno de nuestros Comandantes que hoy 08 de Mayo esta de manteles largos, el es Julio César Farfan, le deseamos muchas felicidades y bendiciones de parte de Dios.... Adelante ¡¡¡ CHECHA !!!


REPRESENTACIÓN EN EL CALJ 2011

Aquí les dejamos la foto de los chicos que nos representaron en el CALJ del Distrito Norte del mes de Abril, esperamos que para la próxima podamos ir todos....


UNIVERSO HUMANO

Lectura: Hechos 28:16-31.

"Y Pablo […] recibía a todos los que a él venían" Hechos 28:30

Durante las décadas de 1920 y 1930, el fotógrafo August Sander decidió retratar diferentes facetas de la sociedad alemana. A través de sus lentes vio operadores de fábricas y financistas, actrices y amas de casa, nazis y judíos. Aunque su colección publicada contiene sólo personas de su ciudad natal, Colonia, y de los alrededores, Sander captó lo que David Propson, en un artículo del periódico The Wall Street Journal, denominó «un universo humano en su esfera limitada».

Esta frase me resulta una descripción apropiada de nuestras vidas y de la gente con quien nos encontramos día tras día. Dondequiera que vivamos, nos cruzamos con personas de muchas extracciones y creencias.

El apóstol Pablo viajó y predicó durante años antes de ser encarcelado en Roma. Allí continuó alcanzado personas con el evangelio, porque se interesaba en ellas y deseaba que conocieran a Jesucristo. El libro de los Hechos concluye con el confinamiento de Pablo en esa ciudad, viviendo bajo vigilancia en una casa alquilada, donde «recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo» (Hechos 28:30-31).

En vez de centrarse en sus limitaciones, Pablo las consideraba oportunidades. Esta es la clave para nosotros también. Hoy hay un universo humano a nuestro alcance.

Reflexión: El evangelio es un regalo invalorable que se ofrece gratuitamente a todos.

AGENTES DE CAMBIO


"Si alguno se limpia […], será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra" 2 Timoteo 2:21

Con cuatro años de seminario como experiencia, me lancé a mi primer ministerio con una amplia agenda de actividades. Como pastor nuevo, pensé que estaba allí para cambiar ese lugar. Sin embargo, Dios utilizó ese sitio para cambiarme a mí.

La junta directiva de la iglesia me respaldó, pero me mantenía implacablemente ocupado en detalles administrativos. Tuve que aprender a trabajar con líderes laicos, a ser cuidadoso en mi trabajo y a soñar con los demás.

A menudo, pensamos que Dios nos asignó la tarea de cambiar el mundo que nos rodea, cuando, en realidad, Él tiene interés en cambiarnos a nosotros. ¿Para qué? Para hacernos un «instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra» (2 Timoteo 2:21). Dios suele utilizar a las personas más insólitas en los lugares más inverosímiles para enseñarnos algunas de las lecciones más difíciles de la vida. Y cuando pensamos que lo hemos logrado, Él tiene más cosas para enseñarnos.

Hace poco, entré en una nueva etapa del ministerio. Quizá sea un «veterano experimentado», pero todavía sigo aprendiendo, creciendo y asombrándome ante la manera en que Dios continúa moldeando este instrumento para Sus nobles propósitos.

Si quieres ser un agente de cambio, no resistas al verdadero Agente de cambio. ¡El Señor desea de todo corazón lo mejor para ti (y para Él)!

Reflexión: Sólo cuando somos cambiados podemos ser agentes de cambio.

MIEDO DE CAERSE

Lectura: Salmo 46.

"El eterno Dios es tu refugio, y acá abajo los brazos eternos"Deuteronomio 33:27

¿Alguna vez soñaste que te caías de la cama o de un lugar muy alto y te despertaste del susto? Recuerdo que, cuando era niño, solía despertarme con una sensación tan aterradora como esa.

Una vez, escuché la historia de un hombre que, en cuanto se dormía, experimentaba esta sensación. Eso lo despertaba de una manera tan desagradable que temía volver a dormirse. Tenía miedo de morir, y se imaginaba que estaba cayendo en un pozo sin fondo.

Entonces, una tarde, mientras caminaba por un cementerio, vio esta frase grabada en una lápida:

ACÁ ABAJO LOS BRAZOS ETERNOS.

Esas palabras le hicieron recordar que, cuando los creyentes mueren, son llevados con cuidado por el Señor a su hogar en el cielo. Se acordó de la seguridad del salmista: «Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo» (Salmo 23:4).

El anteriormente temeroso hombre se dio cuenta de que en la vida y en la muerte —e incluso durante el sueño— los «brazos eternos» de nuestro amoroso Señor están allí para contenernos y abrazarnos. Esa noche pudo cantar lo que había aprendido en la niñez: «¡Enséñame a vivir de modo que mi temor a la tumba sea tan pequeño como el tamaño de mi cama!». Por fin, pudo dormirse sin miedo.

Reflexión: Puedes confiar en Dios tanto en la oscuridad como en la luz.

TENGO A JESÚS PARA ESTO

Lectura: Salmo 66:1-15.

"No te desampararé, ni te dejaré" Hebreos 13:5

En una reunión de evangelización, en Irlanda, el orador estaba explicando qué significa permanecer en Cristo y confiar por completo en Él en toda dificultad. Al concluir su mensaje, repitió varias veces: «Significa que, en toda situación, puedes seguir diciendo: “Tengo a Jesús para esto”».

Más tarde, la reunión quedó abierta para dar testimonios. Una joven dijo: «Hace unos minutos, me entregaron este telegrama. Dice: “Mamá está muy enferma. Toma el tren de inmediato”. Cuando vi esas palabras, supe que el mensaje de esta noche era justo para mí. Mi corazón miró al cielo y dijo: “Tengo a Jesús para esto”. Al instante, mi alma se inundó de paz y fortaleza».

Tres o cuatro semanas después, el evangelista recibió una carta de esta mujer, que decía: «Gracias otra vez por el mensaje que dio ese día. La vida se ha convertido en un salmo ininterrumpido de victoria porque me di cuenta de que, sin importar lo que suceda en la vida, tengo a Jesús para eso».

Esa creyente había hallado en Cristo a la Persona que estaría con ella «por el fuego y por el agua», y que la sacaría «a abundancia» (Salmo 66:12).

Si estás soportando una gran prueba de aflicción, recuerda que… ¡tienes a Jesús para eso!

Reflexión: Si siempre permanecemos en Cristo, descubriremos que Cristo siempre permanece con nosotros.

UNA NUEVA NORMALIDAD

Lectura: Romanos 6:1-11.

"Como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva" Romanos 6:4

Después que el médico me comunicó que tenía cáncer, traté de escuchar lo que decía, pero no pude. Me fui a casa, me tapé la cabeza con una manta y me quedé dormida sobre el sofá, como si el sueño pudiera cambiar el diagnóstico.

Cuando al fin pude armarme de valor para contarlo a mis seres queridos, mi amiga Judy Shreur dijo algo particularmente memorable. Después de expresarme su comprensión, dijo: «Esto es lo que va a pasarte. Vas a sentirte terriblemente mal durante tres días. Después, te levantarás, comprenderás lo que tienes que hacer y seguirás adelante con tu vida». Luego, agregó: «Creo que eso tiene que ver con la muerte, la sepultura y la resurrección».

En ese momento, no lo creí. Estaba segura de que la vida, como yo la entendía, había terminado. Nada volvería a ser igual. No podía pensar en volver a sentirme normal. Pero ella tenía razón. Tres días después, me desperté y me di cuenta de que no me sentía tan mal. Entonces, poco a poco, a pesar del sufrimiento físico por la quimioterapia, mi condición emocional y espiritual mejoró notablemente. «Morí» a mi antigua realidad y «resucité» a una nueva normalidad.

Gracias a Dios, Él se especializa en resurrecciones. Para aquellos que han muerto con Cristo, morir a una realidad significa resucitar a una nueva y gloriosa normalidad, para que «andemos en vida nueva» (Romanos 6:4).

Reflexión: Estar «en Cristo» es participar de Su vida, muerte y resurrección.

LO BELLO DE PERDONAR

Lectura: Lucas 15:11-24.

"Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, […] y le besó" Lucas 15:20

Para Larry y Mary Gerbens, lo que comenzó como una colección se ha convertido en una oportunidad de servicio. Durante los últimos diez años, han estado coleccionando obras de arte basadas en la historia del hijo pródigo, que se relata en Lucas 15. Dicha colección incluye una pintura de Rembrandt y algunos trabajos de otros artistas que describen dicho relato.

Los Gerbens querían compartir su colección; entonces, la exhibieron en una universidad de su localidad. Larry dijo: «Los artistas nos han ayudado a nosotros, y esperamos que sus obras ayuden a otros».

Mientras recorría la muestra, quedé impactado por la profunda necesidad del hijo, su sincero arrepentimiento y el hermoso perdón del padre reflejados en las diversas obras de arte: pinturas, grabados al aguafuerte, cristalerías, bocetos y cortinas de seda.

Todos hemos sido como el hijo en esta historia, cuyos planes para su vida eran diferentes a los que su padre tenía para él. Todos hemos abandonado a nuestro Padre celestial (Romanos 3:10-12). No obstante, Él nos da la bienvenida cuando regresamos a Su lado.

Tú también verás lo bello del perdón en el rostro de tu Padre celestial cuando clames a Él, diciendo: «Padre, he pecado…» (Lucas 15:18). Si estás lejos de Dios, regresa ahora a casa y experimenta Su amor.

Reflexión: Cuando Dios perdona, quita el pecado y restaura el alma.

¡GRACIAS, SEÑOR!

Lectura: Salmo 75.

"Gracias te damos, oh Dios, gracias te damos" Salmo 75:1

En Ministerios RBC, nuestro equipo de recursos humanos ha desarrollado un programa eficaz y alentador centrado en la gratitud.

Cuando un empleado observa que otro hace algo bueno en la oficina, él o ella puede tomar una tarjeta especial de agradecimiento, provista por recursos humanos, y escribirle una nota de reconocimiento. Te sientes muy bien cuando entras en tu oficina y encuentras una de esas tarjetas en tu escritorio.

¿No es grandioso que te agradezcan por una tarea bien hecha? ¿Un «gracias» amable y de corazón no te alegra el día? ¿Y saber que tu trabajo es valorado no hace que tus relaciones interpersonales sean un poco más especiales?

A todos les encanta que les den las gracias. Incluso a Dios. Nuestro Padre celestial se siente complacido con nuestras expresiones de gratitud hacia Él. Su voluntad es que le digamos: «Gracias, Señor». Pablo dijo: «Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús» (1 Tesalonicenses 5:18 NVI). El escritor de Hebreos avanza un paso más, al decir: «Seamos agradecidos. Inspirados por esta gratitud, adoremos a Dios como a él le agrada» (12:28 NVI).

Continúa buscando maneras de mejorar tu relación con Dios. No te olvides de lo que quizá sea la forma más elemental de adorarlo y honrarlo: Dile «gracias».

Reflexión: La adoración que Dios más acepta procede de un corazón agradecido.

MUCHÍSIMO MEJOR


"Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor" Apocalipsis 21:4

Después de sufrir tremendamente, primero de cáncer y luego del extenuante régimen médico, el pastor Dan Cummings estaba cansado. Tras dos semanas de tratamiento en Texas, ansiaba regresar a su casa en Michigan. En una nota en su blog, escribió: «Hoy estoy mucho mejor […]. Es asombroso lo que hace un poco de hidratación. […] Este fin de semana, tomaré un vuelo de regreso a casa para seguir allí con el tratamiento».

Dan volvió a Michigan, pero, después de varios días, su viaje en esta tierra terminó. Fue al cielo para estar con Dios, a quien amaba con cada milímetro de su cuerpo debilitado, pero con un espíritu vigoroso.

Pocos días después, cuando miré en su blog, las palabras «hoy estoy mucho mejor» me sacudieron. Entre lágrimas, sonreí al saber que Dan ahora experimentaba una vida que era realmente «mucho mejor» (Filipenses 1:23).

Algún día, los que confesamos el nombre de Jesús también iremos a ese lugar donde no hay «muerte, ni […] llanto, ni clamor». Es un sitio donde no hay más dolor y en el que un Padre amoroso promete enjugar «toda lágrima de [nuestros] ojos» (Apocalipsis 21:4).

La vida que tenemos aquí no es lo único que existe. Hay un lugar muchísimo mejor, que Jesús está preparando para los que le aman (Juan 14:2-3).

Reflexión: Cielo = sin dolor, sin noche, sin muerte, sin lágrimas.