LO BELLO DE PERDONAR

Lectura: Lucas 15:11-24.

"Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, […] y le besó" Lucas 15:20

Para Larry y Mary Gerbens, lo que comenzó como una colección se ha convertido en una oportunidad de servicio. Durante los últimos diez años, han estado coleccionando obras de arte basadas en la historia del hijo pródigo, que se relata en Lucas 15. Dicha colección incluye una pintura de Rembrandt y algunos trabajos de otros artistas que describen dicho relato.

Los Gerbens querían compartir su colección; entonces, la exhibieron en una universidad de su localidad. Larry dijo: «Los artistas nos han ayudado a nosotros, y esperamos que sus obras ayuden a otros».

Mientras recorría la muestra, quedé impactado por la profunda necesidad del hijo, su sincero arrepentimiento y el hermoso perdón del padre reflejados en las diversas obras de arte: pinturas, grabados al aguafuerte, cristalerías, bocetos y cortinas de seda.

Todos hemos sido como el hijo en esta historia, cuyos planes para su vida eran diferentes a los que su padre tenía para él. Todos hemos abandonado a nuestro Padre celestial (Romanos 3:10-12). No obstante, Él nos da la bienvenida cuando regresamos a Su lado.

Tú también verás lo bello del perdón en el rostro de tu Padre celestial cuando clames a Él, diciendo: «Padre, he pecado…» (Lucas 15:18). Si estás lejos de Dios, regresa ahora a casa y experimenta Su amor.

Reflexión: Cuando Dios perdona, quita el pecado y restaura el alma.

¡GRACIAS, SEÑOR!

Lectura: Salmo 75.

"Gracias te damos, oh Dios, gracias te damos" Salmo 75:1

En Ministerios RBC, nuestro equipo de recursos humanos ha desarrollado un programa eficaz y alentador centrado en la gratitud.

Cuando un empleado observa que otro hace algo bueno en la oficina, él o ella puede tomar una tarjeta especial de agradecimiento, provista por recursos humanos, y escribirle una nota de reconocimiento. Te sientes muy bien cuando entras en tu oficina y encuentras una de esas tarjetas en tu escritorio.

¿No es grandioso que te agradezcan por una tarea bien hecha? ¿Un «gracias» amable y de corazón no te alegra el día? ¿Y saber que tu trabajo es valorado no hace que tus relaciones interpersonales sean un poco más especiales?

A todos les encanta que les den las gracias. Incluso a Dios. Nuestro Padre celestial se siente complacido con nuestras expresiones de gratitud hacia Él. Su voluntad es que le digamos: «Gracias, Señor». Pablo dijo: «Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús» (1 Tesalonicenses 5:18 NVI). El escritor de Hebreos avanza un paso más, al decir: «Seamos agradecidos. Inspirados por esta gratitud, adoremos a Dios como a él le agrada» (12:28 NVI).

Continúa buscando maneras de mejorar tu relación con Dios. No te olvides de lo que quizá sea la forma más elemental de adorarlo y honrarlo: Dile «gracias».

Reflexión: La adoración que Dios más acepta procede de un corazón agradecido.

MUCHÍSIMO MEJOR


"Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor" Apocalipsis 21:4

Después de sufrir tremendamente, primero de cáncer y luego del extenuante régimen médico, el pastor Dan Cummings estaba cansado. Tras dos semanas de tratamiento en Texas, ansiaba regresar a su casa en Michigan. En una nota en su blog, escribió: «Hoy estoy mucho mejor […]. Es asombroso lo que hace un poco de hidratación. […] Este fin de semana, tomaré un vuelo de regreso a casa para seguir allí con el tratamiento».

Dan volvió a Michigan, pero, después de varios días, su viaje en esta tierra terminó. Fue al cielo para estar con Dios, a quien amaba con cada milímetro de su cuerpo debilitado, pero con un espíritu vigoroso.

Pocos días después, cuando miré en su blog, las palabras «hoy estoy mucho mejor» me sacudieron. Entre lágrimas, sonreí al saber que Dan ahora experimentaba una vida que era realmente «mucho mejor» (Filipenses 1:23).

Algún día, los que confesamos el nombre de Jesús también iremos a ese lugar donde no hay «muerte, ni […] llanto, ni clamor». Es un sitio donde no hay más dolor y en el que un Padre amoroso promete enjugar «toda lágrima de [nuestros] ojos» (Apocalipsis 21:4).

La vida que tenemos aquí no es lo único que existe. Hay un lugar muchísimo mejor, que Jesús está preparando para los que le aman (Juan 14:2-3).

Reflexión: Cielo = sin dolor, sin noche, sin muerte, sin lágrimas.

TEXTEAR A DIOS


"Nosotros, […] no cesamos de orar por vosotros" Colosenses 1:9

Un artículo del periódico The Washington Post hablaba de una jovencita de 15 años que envió y recibió 6.473 mensajes de texto por teléfono móvil en un solo mes. Ella dice que, si no pudiera comunicarse constantemente con sus amigos, se moriría. Y no es la única. Investigadores afirman que los jóvenes estadounidenses envían y reciben un promedio de más de 2.200 mensajes de texto por mes.

A mí me parece que esta constante comunicación digital ilustra de manera notable lo que la oración podría y debería ser para todo seguidor de Cristo. Al parecer, Pablo estaba continuamente en actitud de oración por los demás: «Nosotros, […] no cesamos de orar por vosotros» (Colosenses 1:9). «Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu» (Efesios 6:18). «Orad sin cesar» (1 Tesalonicenses 5:17). Pero ¿cómo es posible hacer esto?

El misionero Frank Laubach describía su costumbre de «disparar» oraciones por las personas con las que se cruzaba durante el transcurso del día. En cierto modo, estaba «texteando» a Dios a favor de esas personas al permanecer en comunicación constante con el Padre. Laubach creía que la oración es la fuerza más poderosa del mundo, y decía: «Mi función, en este momento, es vivir conversando continuamente con Dios en mi interior y estar totalmente dispuesto a cumplir Su voluntad».

Ora sin cesar. Quizá lo que Pablo nos instó a hacer pueda llevase a cabo.

Reflexión: La oración debería tornarse tan natural como respirar.

¿A QUE EDAD DECIDES SER EXPLORADOR DEL REY?

Muchas veces existen los dichos que Exploradores del Rey lo traemos en la sangre, o que en nuestras venas corre sangre de Explorador, estos y muchos más; pero que tal vez no todos los que dicen eso lo sienten en sus venas o corazón. En esta oportunidad queremos compartir con ustedes una imagen de algo muy cierto, que desde el nacimiento se puede ser Explorador del Rey. Como líderes aprendamos a inyectar en los muchachos lo que decimos que corre por nuestras venas "SANGRE DE EXPLORADOR" y que ellos aprendan a amar este ministerio como muchos de nosotros lo amamos....

ÚLTIMA LÍNEA DE DEFENSA

Lectura: Romanos 8:31-39.

"Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó" Romanos 8:37

En Gettysburg, Pennsylvania, se libró una batalla que determinó el destino de la Guerra Civil en los Estados Unidos. Uno de los puntos cruciales del conflicto fue un montículo rocoso llamado Little Round Top, donde el coronel Joshua L. Chamberlain y los hombres del 20〫. Batallón de Infantería de Maine resistieron con todas sus fuerzas. Si las tropas confederadas hubiesen vencido a estos hombres, algunos historiadores creen que el ejército de la Unión habría sido rodeado y que posiblemente habría perdido la guerra. El "20〫de Maine" era la última línea defensiva.

Los seguidores de Cristo también participan de una guerra crucial. Al luchar "contra las asechanzas del díablo" (Efesios 6:11), se nos llama a vestirnos con la armadura de Dios y a resistir firmes en la lucha (vv. 10-18).

Y, al igual que los soldados de Gettysburg, tenemos una "última línea defensiva". No obstante, en nuestro caso, esta defensa es más poderosa que cualquier fuerza humana. En Romanos 8:31-39, Pablo dice que nuestra confianza, en última instancia, se basa en el amor imperecedero de Cristo. Nuestra protección es tan completa que nada "nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro" (v. 39).

Cuando el enemigo nos abruma y todo parece estar perdido, recuerdo que tenemos una última línea defensiva imbatible: "Somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó" (v. 37)

Reflexión: El plan de Dios siempre conduce a la victoria.

ALGO QUE NO TE PUEDES PERDER !!!!!!!

Esto es para todos !!!!!!!!!


Ah!!!! y como diría alguien por allí, lo importante que la Comida es Gratis.......

MISERICORDIAS DE DIOS

Lectura: Génesis 32:3-13.

"Menor soy que todas las misericordias […] que has usado para con tu siervo" Génesis 32:10

«Menor soy que todas las misericordias de Dios». Esta era la inscripción que George Herbert, poeta y clérigo inglés del siglo xvii, grabó en su anillo de sello, y era la frase con la cual firmaba sus cartas y libros. Jacob había dicho estas palabras al meditar en la bondad que Dios, demostrada hacía él aun en medio de su pecado y vergüenza: «Menor soy que todas las misericordias y que toda la verdad que has usado para con tu siervo» (Génesis 32:10).

La palabra «misericordias» viene del término hebreo kjesed, que significa el amor permanente de Dios. Creo que es importante que haya brotado del corazón de una persona que se consideraba totalmente indigna.

Al depender únicamente del fiel amor del Señor, Jacob exclama: «Líbrame». Qué combinación extraña de ideas: Reconoce que no es digno, pero ruega ser liberado (vv. 10-11). En contraposición a algunos que creen que todo está en orden, Jacob sabía que lo que había presentado delante del Señor había sido arruinado por el pecado. Se consideraba una persona que no merecía la gracia de Dios. Sin embargo, su esperanza no dependía de su dignidad, sino de la promesa de Dios de que derramaría Su favor sobre aquellos que se cobijaran bajo Su misericordia. La humildad y el arrepentimiento son las llaves que abren el corazón del Señor.

Como lo hizo con Jacob, Dios nos escucha cuando clamamos humildemente a Él rogando por Su misericordia.

Reflexión: La misericordia es una bendición inmerecida que Dios le concede a un receptor indigno.

¿QUÉ DA FELICIDAD?


"Todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del Sol" Eclesiastés 2:11

Después de estudiar el efecto del boom económico en Japón, posterior a la Segunda Guerra Mundial, Richard Easterlin concluyó que el crecimiento financiero no siempre produce una mayor satisfacción. Por otro lado, Betsey Stevenson y Justin Wolfers realizaron encuestas en más de 100 países y determinaron que la satisfacción en la vida es mayor en las naciones más ricas.

Entonces, ¿quién tiene razón? Veamos lo que dice el escritor de Eclesiastés. ¡Él debería saberlo! Fue un hombre realmente rico (2:8) y tenía los medios para probar todo lo que hay en este mundo… ¡y sin duda lo hizo! Se dedicó a los placeres (vv. 1-3), a los grandes proyectos (vv. 4-8), a los entretenimientos (v. 8) y al trabajo arduo (vv. 10-11). Sin embargo, llegó a la conclusión de que todo era «vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del Sol» (v. 11).

La satisfacción duradera no proviene de tener cosas tangibles como una cuenta de ahorros o bienes materiales. Los sucesos recientes han demostrado que estas cosas pueden perder repentinamente su valor. Para hallar la felicidad verdadera, debemos buscarla en Alguien que no sea de «debajo del Sol». Y ese es Jesús, nuestro Salvador.

El escritor de himnos Floyd Hawkins lo expresó así: «Descubrí el camino a la felicidad. Descubrí el camino al gozo. Descubrí el alivio para la tristeza […] cuando encontré a Jesús, mi Señor». Sólo Él puede dar pleno gozo (Juan 15:11).__ CPH

Reflexión: Para conocer la felicidad, conoce a Jesús.